viernes, 28 de marzo de 2008

De manos manchadas con sangre, dobles apellidos e historia

En plena discusión sobre las retenciones que realiza el gobierno nacional al mundo agropecuario nos pareció interesante recordar que algunos protagonista civiles que acompañaron fervorosamente a la última dictadura en cargos de suma relevancia (Martínez de Hoz, Solanet, etc.) son los hijos y nietos de quienes fundaron la Sociedad Rural Argentina. Hoy, siguen manejándola a través de sus bisnietos, quienes han multiplicado las hectáreas y los dólares de sus cuentas estrepitosamente en los últimos años, y sin embargo pretenden no pagar ningún tipo de impuestos. Nada de estado, de rentas, nada de nada. Solo tributan el diezmo en la iglesia. Ya lo dijo Jesús: al Cesar lo que es del Cesar.
Eso sí: cuando necesitan un puente, una represa, un camino, energía, etc., QUIEREN ESTADO. Estado siervo.
Añoran el medievalismo de derecho de pernada, del amo y los siervos de la gleba, donde todos debían tributarles a ellos respeto, dinero y vida. Están convencidos que los demás somos “negros” inferiores y por lo tanto es justo en medida de su superioridad, que nos escupan, que nos usen, que nos exploten, que se hagan millonarios parados sobre nuestros hombros y que encima seamos nosotros mismos (miren sino a los chacareros, a CONINAGRO) los que salgamos a defender sus intereses.
Desde 1930 en adelante, estos pitucos señores que ya no usan guantes blancos porque “se nota la sangre sobre tela clara”, han acompañado, alentado, financiado y hasta dirigido los golpes de estado y las intentonas de golpes.
Argentinos, recordemos que hacer memoria es una obligación de los que tienen la panza llena.
No hay opulencia, pero hay trabajo.
No hay trabajo de calidad, pero cada vez hay menos pobreza estrucural.
Vamos por más.
Esperamos escuchar a los chacareros decir: la tierra para el que la trabaja!!!

1 comentario:

walter besuzzo dijo...

Martin lo pongo en mis Links y empezare la difusion de su blog haga lo mismo